
Por alguna razón vivimos en constante cambio, por algo Ortega nos dice: "El gran drama del hombre es tener que hacerse a sí mismo cada día". Nos encontramos en la inevitable necesidad de forjarnos, buscarnos, esta tarea es la más compleja de todas, porque es más fácil evadirnos de la responsabilidad del ser. Preferimos no pensar en nuestras cadenas y no oír la voz del alma. Hoy he visto la película"Encuentro con hombres notables", y me ha pasado algo extraño, parece que todo lo que hoy hago no es suficiente, lo que me falta está ahí latente, oculto, quizás no he querido escucharme verdaderamente y me cuestiono, ahora en este momento ¿Por qué estudié filosofía? ¿Realmente enseño del alma? La verdad es que las respuestas a estas preguntas no las tengo...Me atraen una infinidad de cosas y temas que van más allá de este desgastado pensamiento occidental. Algo me dice que no deben morir en mí las preguntas, algo me tendrá que decir oriente, algo tendrá que decirme mi alma escondida. Tengo que buscar dentro de mí o fuera de mí, pero tengo que saber que soy una hoja en el viento, y quizás también un ave que debe volar alto porque así estaba escrito.
Pensar que hay algo...en algún lugar...para mí y por mí.